En estos días que corren de Halloween, estoy convencido de que la historia más sublime de terror es la de un amor imposible. Se cumple por estas fechas, además, mi 36 aniversario.Porque el tiempo no cura nada, quiero acordarme de aquel amor adolescente que nunca volverá.
Va por ti, estés donde estés.
¡Felicidades, Jose! Vaya, sois muchos figuras los que habéis nacido en octubre (entre ellos mi hijo y mi hermano, que también tienen lo suyo).
ResponderEliminarPor cierto, bonito homenaje al recuerdo de ese amor adolescente que el tiempo no consigue curar.
Feliz fin de semana.
Muchas felicidades!!!. Sí que hay mucho escorpio suelto :) (mi hija también).
ResponderEliminar¿Sabes que tengo ese poster en la entrada de mi casa?. Me encanta, y la peli y todo. Y la voz de Annie Lenox!!!!.
Besos.
Gracias, Maribel.
ResponderEliminarAhora que se acaba de estrenar el remake americano de la película Déjame entrar, una historia de amor entre dos adolescentes en clave vampírica, me pareció oportuno recordar que el cine de terror también ha tenido grandes historias de amor.
Y como dice Aute, el resto es humo.
Un abrazo.
Gracias, Liuva.
ResponderEliminarUna de esas películas asociadas a un recuerdo que, por mucho tiempo que pase, seguirá en la retina. Y Annie Lenox le da el punto justo de dramatismo.
Por cierto, también tengo el póster.
Un abrazo.
Alicia, he visto tu relato de Halloween en el blog de Maribel, y lo he añadido al listado de los presentados en mi blog. Espero que te parezca bien.
ResponderEliminarUna bonita y misteriosa historia la de las dos tumbas y el ramo de rosas.
Teresa, me complace que te hayas fijado en el mismo. Por mi parte, no hay ningún problema. Siempre me pareció una bella historia. Fue al leer tu propuesta, en el blog de Maribel, cuando decidí contaros justo hasta dónde se puede leer.
ResponderEliminarJosé Antonio, primeramente te deseo muchas felicidades. He andado despistada con otro aniversario y no sé si habré llegado tarde al tuyo...La canción del video me ha encantado.
El gran amor siempre tiene un punto de terror. Si crees que lo has encontrado, tienes terror a perderlo. Si no lo encuentras, tienes terror a morir sin haberlo hallado. Y si lo encuentras y no es correpondido ¡Eso es para morirse de terror directamente!
Por último yo he vivido lo del amor de adolescentes que no pudo ser en mi pequeñuelo mayor. Él siempre dice que la historia no falló por falta de amor si no que no se encontraron en el momento adecuado. Sinceramente, a pesar de que ha pasado bastante tiempo, me gustaría que se volviesen a encontrar para abrir o cerrar definitivamente esa puerta que quedo mal entornada.
Un abrazo
Hola Teresa,
ResponderEliminarYo también me enteré de tu propuesta por el blog de Maribel, pero no he participado por falta de tiempo. Igual en otra ocasión.
Soy un gran aficionado al cine y a la literatura de terror.
Un saludo.
Gracias, Alicia.
ResponderEliminarLo cierto es que el 31 de octubre me ha pillado en medio de un catarro, el cual se ha visto agravado por las copicas que me tomé.
En cuanto al amor, he encontrado a las dos mujeres de mi vida: la que me da besos y la que me da insomnios. Pero siempre quedan heridas por cerrar...
Un abrazo.