Todo comenzó el 18 de diciembre de 2015 en Villavieja 6, un bar de copas del Casco Antiguo de Alicante. Dos días después, los españoles éramos llamados a las urnas. Recuerdo como si fuera hoy una apuesta que hice conmigo mismo. Dependiendo del número de ejemplares que se vendiesen del libro, así votaría a uno u otro partido. Supongo que habrá quien juzgue irresponsable mi actitud, pero a la luz de los despropósitos que hemos visto en los últimos meses nadie puede negar que tiene cierto sentido abrazar el sinsentido. No me pareció tan gracioso cuando el caprichoso destino quiso que votara a… una formación que empieza por pe. Menos mal que los piadosos políticos me dan otra oportunidad.
martes, 14 de junio de 2016
ANÉCDOTAS DE PELUSILLAS
Todo comenzó el 18 de diciembre de 2015 en Villavieja 6, un bar de copas del Casco Antiguo de Alicante. Dos días después, los españoles éramos llamados a las urnas. Recuerdo como si fuera hoy una apuesta que hice conmigo mismo. Dependiendo del número de ejemplares que se vendiesen del libro, así votaría a uno u otro partido. Supongo que habrá quien juzgue irresponsable mi actitud, pero a la luz de los despropósitos que hemos visto en los últimos meses nadie puede negar que tiene cierto sentido abrazar el sinsentido. No me pareció tan gracioso cuando el caprichoso destino quiso que votara a… una formación que empieza por pe. Menos mal que los piadosos políticos me dan otra oportunidad.
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Espero que haya más chascarrillos que compartir, son de lo más ameno. Gracias, lobo estepario.
ResponderEliminarUn abrazo.
No hay mucho más que rascar, amigo. Tendrás que esperar al próximo libro y sabe Dios cuándo será eso.
EliminarUn abrazo.
Yo no olvidaré la foto de la Feria del Libro. Ja, ja, ja...
EliminarAunque la fotógrafa le puso empeño, las condiciones materiales y mi fobia a los objetivos, no se lo pusieron nada fácil.
Un abrazo, Pedro.
Por fortuna, Esther, a mí la cámara me ama y yo la amo a ella.
EliminarUn abrazo.
Ja, ja, ja.
Eliminar¡Quién tuviera ese instinto de conservación!
No cambies, amigo.
Un viaje largo el de "Pelusillas en el ombligo". Un placer compartir el viaje.
ResponderEliminarUn abrazo.
Más largo para unos que para otros, porque si no recuerdo mal tú te libraste de una presentación por una afonía de nada.
EliminarUn abrazo.
De afonía nada, chato, ¡un gripazo de antología y cante jondo! Lo peor es que me perdí uno de esos deliciosos tés de Waslala :-(((
EliminarDe todas formas, te las arreglaste muy bien sin mí ;-)
Un abrazo.
Les dije: "Prestáis atención o enseño las pelusillas del ombligo". Y me escucharon como corderitos.
EliminarUn abrazo.
Siempre me ha parecido que eres un hombre de recursos.
EliminarSerá un placer seguir tus andanzas en el mundo del papel y las presentaciones.
Espero que las Pelusillas os sigan proporcionando muchas más anécdotas.
ResponderEliminarAprovechando que en estos días he revisado el texto de Charli 3, porque comienza su ilustración, traigo esta frase que se la podríamos dedicar a muchos lectores: "¿No has aprendido la lección de que lo más grande no es lo más poderoso?".
Pues eso. Ojo con las Pelusillas, pequeñas pero matonas.
Un abrazo.
Muchas gracias, Maribel. Para mí es más difícil bordar un microrrelato de calidad que escribir una novela, por eso prefiero el microrrelato, me gusta probarme a mí misma. Es una lástima que la mayoría de la gente no vea el poder que encierra lo pequeño, lo humilde.
EliminarFelicidades por el nuevo proyecto de Charli, mi sobrino estará encantado de seguir descubriendo sus aventuras.
Un abrazote.
Interesante lección, Maribel, en un mundo en el que no eres nadie si no sales por televisión. Como siempre, Charli nos muestra el camino a seguir: el de las pelusillas.
EliminarUn abrazo.
Me he comido una coma. Repito.
ResponderEliminarJose, viajar por el mundo con "Pelusillas en el ombligo" de la mano, al fin y al cabo, no deja de ser como ir con los hijos, nunca sabes, cuándo, dónde, cómo o con quién te van a acabar sorprendiendo.
Ya nos contareis si en los viajes que aún queden por realizar os sorprenden con alguna nueva travesura.
Un abrazo.
Gracias Alicia, la comparación es muy acertada. No te preocupes, que si nos tropezamos con alguna aventurilla más, José Antonio se encargará de chivárosla, y yo de matizarla ;-)
EliminarUn abrazo.
Lo más sorprendente de escribir, Alicia, es que la realidad supera siempre a la ficción. Nunca encontraré argumentos tan buenos como los que me ofrece la vida.
EliminarUn abrazo.
Y ahora ha ido una coma de más, por lo menos. No repito.
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