Desde
aquel insólito desmayo en el metro, no has vuelto a beber ni una gota de sangre.
Regresas al lugar del incidente para aclarar tus recuerdos. En el rostro de un
joven que escucha música a través de unos cascos se ha dibujado una sonrisa bondadosa.
Quizá ha sido él quien, con una crueldad fuera de lo común, te ha convertido de
nuevo en humano.
Incluido en la antología del III Concurso Internacional de Microrrelatos «Crónicas Microvampíricas» convocado por Diversidad Literaria.


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