La tradición consistía en comprar una caja de Miguelitos en el Círculo Central y comérsela sentados en la acera de los Ejidos. La crema deshacía septiembre. Hipnosis. Regresión. Miguel sigue con la mirada el péndulo hasta caer en trance. El terapeuta le anima a contar lo que ve. «Veo a Fernando Simón bailando manchegas», bromea el pensionista. Lo han intentado un montón de veces, pero es el sujeto menos sugestionable del mundo. El psicólogo no se rinde aún y pide que le cuente alguna anécdota. «Cuando nos casamos, ella parecía un corcel blanco y yo una rosa negra frente a la Puerta de Hierros», musita como si la tuviera delante. Hace una pausa para paladear el tiempo. Miguel tiene los ojos acuosos. Luego prosigue: «La piropeaban quienes pasaban y yo solo quería hacer el amor con ella en el hotel, pero nos quedamos dormidos en los cómodos sofás de recepción». No es el primero ni será el último que viene a su consulta porque no acepta que hayan suspendido la Feria de este año.
miércoles, 23 de septiembre de 2020
miércoles, 16 de septiembre de 2020
SIRTAKI
No me saludes con el codo,
ni choquemos los puños.
Bésame con la mirada,
dame un abrazo de paciencia,
hazme pedorretas en el alma
cuando esté triste.
Me niego a encerrar el cariño
en consignas
desnatadas.
Antes que seguir a la manada,
prefiero bailar el sirtaki.
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