.jpg)
Nunca figuramos entre los favoritos al podio, seguramente porque no disponíamos de estrellas como Giannis Antetokounmpo (Grecia), Nikola Jokic (Serbia), Lauri Markkanen (Finlandia) o Luka Doncic (Eslovenia). Esa circunstancia jugó a nuestro favor, aunque no creo que haya bastado para ganar.
Los partidos amistosos fueron cualquier cosa menos brillantes: tres derrotas y una victoria por la mínima. No extraña que el mundo del baloncesto vaticinara que caeríamos en Octavos. Algunos periodistas, en clara referencia a los siete debutantes, llegaron a escribir que el equipo tenía la ele o que era la España del chupete.
Lindezas aparte, la Selección ha demostrado que ningún listillo tiene derecho a decir adónde puedes llegar. La falta de ego y el trabajo en equipo han sido las claves del triunfo. Nadie ha destacado sobre nadie. Ni siquiera Lorenzo Brown, el hombre tranquilo en la cancha. Cada pieza ha sido decisiva en el tablero de ajedrez. Willy en la pintura, Juancho desde el triple, Garuba poniendo tapones estratosféricos y Rudy traspasando límites en memoria de su padre.
Ojalá en el país de las autonomías, de la desunión, de la descalificación siguiéramos el ejemplo de estos jugadores. Va más allá del deporte.
Me encanta el baloncesto desde que era seguidor de mi hermano cuando jugaba a minibaskets allá por finales de los 60, así que ha llovido y tronado mucho. He visto todos los partidos de la selección, eso sí, al día siguiente, mis nervios me impedían ver el partido en el momento de juego. Es verdad, España ha jugado como equipo, sin estrellas, pero eran una gran defensa y fuertes ante el aro contrario.
ResponderEliminarAunque los partidos los he visto al día siguiente, los he disfrutado mucho, pero hay una cosa que no me ha gustado, ha sido "la compra" de Lorenzo Brown, no me gustan estos ardides muy propios del atletismo, pero hay que reconocer que su costo se ha aprovechado bien, se ha partido el pecho y ha jugado con una "furia" que parecía hispano.
Saludos
Vaya, me alegra saber que no soy el único fanático del baloncesto. He tenido la suerte de vivir los dos Mundiales y los cuatro Eurobasket que ha ganado España. Hemos dejado de ganar los partidos por veinte y treinta puntos. Con esta Selección de ahora, más humana, se sufre más, pero nos sentimos muy identificados.
EliminarUn abrazo.
El deporte nos da muchas lecciones de comportamiento, me alegré mucho de la victoria y felicito a su preparador y a todos ellos. Un abrazo
ResponderEliminarLa mayor lección es que el entrenador, Sergio Scariolo, es uno más. Solo hace falta ver cómo se involucra en los partidos.
EliminarUn abrazo.
Aunque es otro debate, Ester me ha dado la idea de este comentario, es que el deporte da lecciones de comportamiento y de lo contrario, en el doping funciona el doping, la química para conseguir resultados va por delante de la medicina, el miedo a la homofobia, no salen del "armario" aquellos que quisieran, el no saber perder, la carencia de conocimientos, sus sueldos desconsiderados con la sociedad, habrá que recordar que el deporte sigue siendo un apaciguador de masas, pero también para lanzarlas a donde se quiera, no todo es lo que reluce en el deporte profesional.
ResponderEliminarLas malas lecciones del deporte dan para hablar largo y tendido. Odio a los equipos que, por tener una estrella, antes de jugar los partidos, creen que se van a llevar el campeonato.
EliminarUn abrazo.
Disculpad, son las cosas de escribir desde el móvil.
ResponderEliminarEstupendo texto y acertada reflexión. El deporte, una vez más, dándonos lecciones. Para la Olimpiada quisiera que fueran estos mismos jugadores. Un abrazo enorme.
ResponderEliminarGracias, Jorge. El año que viene tenemos Mundial de baloncesto. Será muy difícil, sobre todo porque Estados Unidos, a quien nunca hemos ganado, irá a por todas.
EliminarUn abrazo.