Las vacaciones
son el espejismo de los
tontos.
Las verdaderas, las
auténticas
están en la naturaleza,
un libro,
una charla,
tus ojos.
Mis amigos dicen que me dedico a vivir del cuento. No he escrito ninguna novela porque me parece un género poco comercial.
lo podríamos discutir porque si bien todo eso es valido un reposo, un no pensar, un café solo, un sin horario...
ResponderEliminarAbrazos
Ese sin horario es relativo, porque, al final, incluso en vacaciones, uno se tiene que plantear ciertos horarios y ciertas rutinas.
EliminarUn abrazo.
Las vacaciones son eso y muchas cosas más, se necesitan como el dormir, es parar y recuperarse, es dejar durante un pequeño tiempo de ser esclavos del sistema.
ResponderEliminarSaludos
El sueño es el único territorio donde somos realmente libres: eso sí son unas vacaciones en primera clase.
EliminarUn abrazo.
Me gusta tu planteamiento y, de hecho, procuro hacerlo todo el año. Pero que tampoco voy a renunciar a estar unos días de descanso... Un abrazo, querido lobo.
ResponderEliminarPor supuesto, por supuesto. No soy tan ingenuo como para renunciar a las vacaciones, pero la gran revolución es concederse un descanso en la vida diaria.
EliminarUn abrazo.
Cuando el tiempo es tuyo, son vacaciones. Y cuando tiras el reloj a la basura.
ResponderEliminarIgual que la felicidad son fragmentos de instantes maravillosos, las vacaciones son ratos dedicados a lo que más nos gusta. Sin mirar el reloj.
EliminarUn abrazo.