lunes, 16 de julio de 2012

DEVÓRAME OTRA VEZ
























El tiempo se había detenido, estancado en sus pezones, atrapado en su lengua que se enredaba con la mía.

Siento decepcionarle, querido lector, no le presento la última novela de La Sonrisa Vertical, pero no me niegue que esta frase destila erotismo, atrapa como insecto en el ámbar. Le hablaré del libro al que pertenece este fragmento enseguida. Antes póngase cómodo en su sillón favorito y disfrute, aunque hágalo con moderación. Puede que haya una «Amantis» al acecho.

Por cierto, ¿tiene mascota? Mejor. Yo me deshice de mi perro hará un par de horas. Sé que suena paranoico, pero me observaba de un modo casi enfermizo, hasta el punto de que llegué a convencerme de que en cualquier momento me devoraría.

Hablando de devorar, usted también habrá oído casos de mujeres jóvenes que se casan con viejos a punto de criar malvas. Aún no están fríos en «El ataúd» mientras ellas compran abrigos de visón. Afortunadamente, algunos deseos se revuelven contra su dueño. Igual que en el famoso relato «La pata de mono» del escritor inglés W. W. Jacobs.

Acabo de regresar, querido lector, de tomar un trago y le encuentro en la misma postura que le dejé, hechizado por ese libro misterioso que no ha soltado en toda la tarde. No quiera saber lo que me ha ocurrido. Aún tengo ese olor a chamuscado metido en la nariz. Se me pasará, espero. Quién sabe lo que cruza por la cabeza de esa gente que nos invade de otros países. Se creen que esto es Jauja, que la vida no es un «Sacrificio» constante.

Perdone, el libro es de una escritora llamada Felisa Moreno. Si no es mucho pedir, estimado lector, le agradecería que sacara la mitad de su cuerpo de las páginas abiertas como fauces. Por supuesto que lo entiendo, no está en condiciones de complacerme. Y se deja engullir hasta desaparecer en estos Cuentos caníbales (Amazon, 2012).

4 comentarios:

  1. Te superas, Jose. Esta reseña es muy original, me ha encantado. Y los cuentos seguro que son magníficos, la firma de Felisa Moreno los avala.
    Tengo el libro casi desde que se publicó en Amazon, pero como acumulo tanta lectura todavía no le ha llegado el turno. Espero que, al igual que otros pendientes, caiga durante este verano.

    Un abrazo.

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  2. Seguro que te dejas devorar, Maribel, como yo lo he hecho. Ya me contarás cuando llegues al del perro. Muy inquietante.

    Un abrazo.

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  3. Había comenzado devorando algún acento...

    Jose, creo que hasta que no devoremos el libro realmente no vamos a saciarnos de esas ganas de saber lo qué Felisa Moreno nos ofrece en esta ocasión y que tú nos has hecho intuir de una forma tan peculiar. No dudo de que, como siempre, esos cuentos tendrán buen sabor literario.

    Cuando he leído lo del perro, me ha venido a la cabeza la frase "Él no te habría abandonado". Lo qué es una buena campaña de marketing ja,ja,ja. Fíjate que creo que mis tres chicos me abandonarían a mí antes que a nuestra masccta, ja,ja,ja.

    Un abrazo.

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  4. Yo no distingo ya, Alicia, si un escritor es famoso o si publica en tal o cual editorial, o si desfila en el Orgullo. A mí lo único que me importa es que me devore.
    En cuanto al abandono, yo creo en la soledad constructiva. Sin ella estaríamos perdidos y no tendríamos nada que contar a los que nos rodean.
    Pero si tus hijos te repudian, yo no puedo vivir sin ti.

    Un abrazo.

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