martes, 1 de abril de 2014
ALL YOU NEED IS DOG
Le contó al médico de cabecera que, cuando llegaba el invierno, se deprimía bastante, y este le recomendó, sin mirarle a los ojos, que adoptara un perro. Meses después, otro paciente le vino con el mismo cuento. Estaba a punto de aconsejarle lo de siempre cuando vislumbró por el rabillo del ojo las patas sobre su escritorio y la lengua fuera. Apestaba a alcohol.
Incluido en la antología Otoño e invierno, publicada por Diversidad literaria.
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Una crítica muy inteligente, cargada del cinismo que se impone cuando se retrata la relación entre humanos y animales.
ResponderEliminarEs un relato muy empático par ser alguien que no ha compartido su vida con un perrete.
Abrazotes.
Dicen que los perros son reflejo de sus dueños, de manera que nada soluciona nada.
EliminarUn abrazo.
Es un buen consejo que hay que dar mirando al interlocutor :)
ResponderEliminarUn relato breve e interesante, del que se puede extraer una gran carga.
Un abrazo.
Bueno, no sé si todos necesitamos perro, pero sí perro que nos ladre.
EliminarUn abrazo.
Jose, enhorabuena por esta nueva selección.
ResponderEliminarUn abrazo.
Mientras no gane, eso significa que voy por buen camino.
EliminarUn abrazo.
Es lo malo de las depresiones, que a veces resultan contagiosas. Algunos vicios también.
ResponderEliminarBuen micro, Jose. Enhorabuena.
Un abrazo.
A mí se me contagian antes los vicios que las virtudes, no sé si te pasa a ti. Debe ser que no tengo de mártir ni siquiera la erre.
EliminarUn abrazo.